Un grupo de 180 agricultores de los municipios de El Guamo y El Espinal, asociado al Distrito de Riego de Usocoello en el departamento de Tolima, desde el semestre B de 2013 han registrado pérdidas económicas que ascienden a los $8.750 millones.

Así lo denunciaron a CONtexto Ganadero los afectados que creyeron en la semilla trangénica de maíz blanco de la empresa Pionner, la cual, pese a la advertencia de los productores sigue en el mercado.

Según los agricultores del Usocoello, la preocupación mayor radica en que la semilla variedad ‘30f32 WHR’ se comercializa con aprobación del ICA, entidad de sanidad del Estado que ha recibido varias quejas de quienes compraron sin que hasta este momento el Instituto les haya dado solución alguna. Los avisos sobre la ineficiencia de la semilla se han puesto desde julio de 2013.

Esta redacción consultó al ICA para conocer su respuesta sobre el tema y la que obtuvo señala que mediante la resolución 3371 de 22 de octubre de 2010, expedida por ellos mismos, se autorizó la comercialización de la semilla transgénica de maíz blanco ‘30f32 WHR’. Pero para llegar a esta certificación fue necesario someter a la variedad a una Prueba de Evaluación Agronómica, PEA, la cual evaluó el desempeño productivo y agronómico del maíz. (Lea: Maiceros de Tolima demandarán a empresa fabricante de transgénicos)

“La autorización para comercializar semillas del  maíz blanco ‘30f32 WHR’ en la subregión natural del valle geográfico del río Magdalena se dio después de que el material mostró un comportamiento óptimo cuando fue evaluado bajo las condiciones de esta subregión”, señaló la subgerencia de Protección Vegetal del ICA.

Por su parte, la empresa DuPont, representante de Pioneer en Colombia, quien a su vez se encarga de la comercialización de la semilla en el territorio nacional, en diálogo con CONtexto Ganadero, explicó que a partir del año 2012 varios maiceros del país iniciaron la compra de esta variedad que recibió certificación del ICA.

Sin embargo, Carlos Alberto Rojas Guevara, gerente del Distrito de Riego de Usocoello, indicó que en julio de 2013 comprobaron los problemas productivos con dicha variedad. ¿Basado en qué?, el denunciante aseveró que “las producciones se bajaron en más del 60% y en algún caso fue del 50%. Por eso hay pérdidas superiores a los $2 millones 500 mil por cada hectárea”.

Según Pedro Rojas, ingeniero agrónomo de Usocoello, el incoveniente inició cuando se tuvo que intervenir con insecticidas en los cultivos de maíz, por temas fitosanitarios. “El problema que se obtuvo fue que la tusa no tenía los granos suficientes. Es decir, que si normalmente hay 18 hileras con granos, para esta ocasión el resultado fue de solo 5. Todo esto se originó porque el semestre anterior tuvimos que hacer 5 veces el control de la plaga ‘Spodoptera’, conocida como ‘Cogollero’, que no tiene por qué darle a ese cultivo transgénico, que se supone está certificado por el ICA”, explicó el ingeniero. (Lea: Maiceros de Tolima presentan disminuciones en producción)

Ese mismo julio de 2013, los más de 180 productores de maíz blanco de estos 2 municipios del Tolima interpusieron una queja ante el ICA. “En ese momento ellos debieron hacer algo al respecto, como retirar la comercialización de la semilla, pero no, salieron con que las cartas que habíamos enviado no cumplían con los requisitos, porque la normatividad de transgénicos establece que para poder hacer una reclamación tiene que anexarse la copia de la factura, la bolsa de la semilla, un concepto técnico agronómico donde informen el daño, entre otros. Pero el ICA no constató los problemas que los agricultores tenían en ese momento, ni tampoco le dijo a Pioneer que tenía que retirar la semilla del mercado”, indicó Rojas Guevara.

ICA no ha dado respuesta, luego de 7 meses

Luego de las solicitudes hechas por los maiceros ante el ICA, en enero de 2014, de acuerdo con lo expresado por José René Cardozo, productor de Tolima, la institución empezó a hacer unas visitas, pero hasta el momento no han recibido una respuesta formal.

“No es justo esperar a que lleguen todos los documentos, cuando ya todo el mundo está quebrado. El tema tiene que solucionarse de inmediato”, anotó Cardozo.

Frente a este aspecto, la subgerencia de Protección Vegetal del ICA afirmó que en atención a las quejas recibidas por el comportamiento del material de maíz ‘30F32 WHR’, los funcionarios de la región han intensificado las visitas a los lotes de los agricultores que sembraron dicho material para documentar y establecer de primera mano el comportamiento de la variedad en los campos de los agricultores. (Lea: “Las biotecnologías ayudarán a mitigar la pobreza en el sector rural”: A. Sasson)

“Igualmente, el mes pasado (enero) se desplazó una comisión de funcionarios ICA, de oficinas nacionales para reunirse con los agricultores del departamento del Tolima. En ella se recibieron las respectivas quejas sobre los rendimientos y la presencia de algunos fenómenos como el efecto Xenia y la producción de mazorcas con hileras de granos incompletas. En esta reunión se establecieron algunos lineamientos para hacer frente a esta problemática. Todo este proceso toma tiempo y  estamos a la espera de tener toda la información procesada para tomar medidas de acuerdo a los resultados obtenidos”, aseguró la subgerencia de Protección Vegetal del Instituto.

De igual forma, DuPont indicó que como parte de sus lineamientos de calidad y servicio agronómico han dado seguimiento a las llamadas recibidas con visitas al campo, para así diagnosticar caso por caso el estado de sus cultivos y entender la condición específica de cada agricultor.

“Son distintas las causas que pueden afectar el desempeño de un cultivo. En este caso las condiciones climáticas y la interacción con el medio ambiente específico de Tolima pueden generar este tipo de complicaciones, mismas que no fueron observadas en otras regiones de Colombia en donde el mismo híbrido 30F32WHR fue cultivado brindando excelentes resultados”, explicó la empresa. (Lea: Huila cuenta con 6 variedades híbridas de maíz amarillo)

“Estamos teniendo una pérdida en promedio de $2 millones 500 mil por cerca de 3.500 hectáreas. El temor de la gente en este momento es que en 15 días ya tendremos que haber hecho toda la recolección y no hemos tenido una respuesta. Lo que pensamos es que ellos lo están haciendo a propósito”, puntualizó Pedro Rojas.

Los agricultores que tienen pruebas sobre los daños ocasionados a sus cultivos de maíz están dispuestos a intorponer el recurso legal que sea necesario para que alguien responda por lo que ocurre en la región de Tolima con la semilla, problema que ha dejado más de $8.000 millones en pérdidas.

CONtexto Ganadero hace seguimiento a esta denuncia que afecta a los productores colombianos. Si conoce otro caso no deje de presentarlo ante el medio virtual de Fedegán.