La Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria, Corpoica, desarrolló un estudio entre agosto de 2011 y mayo de 2012 complementario de otro de 2010, para determinar la prevalencia o número de animales con tendencia a presentar una enfermedad.

Esta prevalencia en sí, no implica que un pollo se convierta en potencial amenaza para la salud humana transmitiendo enfermedades como la Salmonella. El estudio analizó los posibles factores de riesgo de contaminación para esta enfermedad, asociada a las condiciones de almacenamiento (ya sea refrigerado o

congelado), los tipos de mercados con ventas al por menor, entre otros factores.

El estudio se realizó únicamente en seis ciudades capitales y no en todo el país. Los niveles de contaminación con Salmonella en la época en que se realizó el muestreo fueron bajos y no demostraron ser suficientes para causar enfermedad en los humanos. (Lea: “Cierre de frontera sirve, pero el contrabando es escurridizo”, Fenavi)

Se recomienda la compra en establecimientos que manejan adecuadamente las redes de frío y no consumir productos de contrabando.

Corpoica reconoce y apoya el esfuerzo de la industria avícola por mejorar la inocuidad del producto, y recomienda al consumidor final y a los proveedores de la cadena comercial, cumplir con los estándares de manipulación e higiene para evitar cualquier contaminación. Es preciso aclarar que en ningún caso, el riesgo por contaminación potencial se presenta por fallas en los controles sanitarios que aplica la industria avícola.

Corpoica continuará trabajando de la mano con las instituciones del Estado, mixtas y privadas para garantizar que los alimentos que están al alcance del consumo humano cumplan con los parámetros de inocuidad que aleje los riesgos de contaminación a través de estrictos controles en las cadenas de producción y comercialización. (Lea: 1.000 toneladas de carne de pollo al mes ingresan de contrabando)