Este cultivo, reconocido por su calidad y alta demanda comercial, requiere un suministro constante y equilibrado de agua que permita su crecimiento, desarrollo y rendimiento, sin comprometer la sostenibilidad del recurso hídrico. (Lea en CONtexto ganadero: Algunas claves para elegir árbol de aguacate Hass en Colombia)
El agua es esencial para los procesos fisiológicos de la planta, como la fotosíntesis, la transpiración y el transporte de nutrientes. En el caso del aguacate Hass, una gestión hídrica inadecuada puede derivar en estrés hídrico, afectando la calidad del fruto y reduciendo los rendimientos. Por otro lado, el exceso de agua puede causar anoxia radicular y enfermedades como la pudrición de la raíz por phytophthora cinnamomi.
En un trabajo desarrollado por la Corporación colombiana de investigación agropecuaria (Agrosavia), titulado ‘Criterios para la definición de planes de fertilización y aplicación de riego en cultivos de aguacate Hass con un enfoque tecnificado’, se explica que “en el cultivo del aguacate, el sistema de riego más utilizado es el riego por goteo, por ser el método más eficiente para suministrar agua en la cantidad correcta y en el momento adecuado para la planta”.
Requerimientos hídricos del aguacate Hass
El aguacate Hass presenta necesidades hídricas específicas que varían según factores como la etapa fenológica de la planta, las condiciones climáticas, el tipo de suelo y la densidad de siembra. En promedio, el cultivo requiere entre 800 y 1.200 mm de agua al año, dependiendo de las características agroecológicas de la región.
De acuerdo con Agrosavia, “el uso de un sistema de riego localizado (goteo o microaspersión) proporciona un riego uniforme y permite mantener la humedad en la zona de raíces a capacidad de campo, con lo cual se puede se puede obtener mejores rendimientos”.
Un manejo adecuado del riego permite que la planta exprese su potencial productivo, logrando altos rendimientos, mayor estabilidad entre cosechas y una mejora en la calidad del fruto. “Además, posibilita un uso racional del agua mediante una gestión sostenible del recurso hídrico y la implementación de sistemas de riego eficientes”, asegura Agrosavia.
En un informe dado por EOS Data Analytics, “el consumo de agua de un cultivo maduro de aguacate Hass es de unos aproximadamente 50 mm por semana”. En cultivos jóvenes, se recomienda un riego de dos a tres veces por semana. Una vez las raíces han crecido y se han establecido durante aproximadamente un año, el riego puede reducirse a una frecuencia semanal.
Programación de riego
La programación del riego en el cultivo del aguacate Hass debe basarse en el conocimiento de las necesidades hídricas específicas del cultivo y las condiciones locales. Para lograr un manejo eficiente, es fundamental considerar las condiciones climáticas, etapas fenológicas del cultivo, características del suelo, herramientas de monitoreo y tecnología y automatización. (Lea en CONtexto ganadero: Transición de una ganadería tradicional comercial a una sostenible)