De acuerdo con Fedebiocombustibles, esta iniciativa busca aumentar el porcentaje de la mezcla de biodiésel y etanol en el Acpm y fomentar el cultivo de palma de aceite y caña de azúcar.
En diálogo con CONtexto ganadero, Jorge Bendeck Olivella, presidente de la Federación Nacional de Biocombustibles de Colombia, Fedebiocombustibles, indicó que en 2015 el país contará con 2 refinerías de aceite, las cuales contribuirán a que la medida de biocombustible que actualmente se usa (9,2%) aumente, y que el cultivo de palma de aceite y caña de azúcar también se incremente.
Según el dirigente gremial, aunque poco se ha podido avanzar en el aumento de la mezcla, la construcción de estas plantas, con dineros de empresas privadas y el apoyo de la banca nacional, significan un logro en la materia. (Lea: 3 aspectos que estancan el uso de biocombustibles en Colombia)
“La primera refinería estará en funcionamiento a partir del mes de marzo de 2015, apenas está en construcción, pero lo que buscamos subir es la mezcla del 12%, entonces hemos avanzado para poder llegar en 2016, seguramente a un 15% de la mezcla. En el caso del etanol esperamos poder alcanzar un 12% en 2014”, dijo Bendeck.
La construcción de la primera refinería está en el municipio de Facatativá y para el mes de marzo del año entrante, de acuerdo con el presidente de Fedebiocombustibles, estará operando en completa capacidad la planta de ‘BioD’, para pasar de 100 mil toneladas por año a 200 mil, “esa planta está en construcción acelerada y ya se cuenta con la materia prima necesaria que proviene ya como aceite desde los Llanos Orientales”.
De otro lado, en el sur del departamento del Cesar también se va a construir una planta que permitirá incrementar en al menos 1% de la mezcla. “Es decir que en menos de un año tendremos 2 plantas de biodiésel nuevas operando en Colombia, para estar llegando a un 13% de mezclas con otras que se están ampliando, entonces en el año 2015 estaremos llegando al 14% de la mezcla, y en 2016 al 15% si es que la política del Gobierno nos permite seguir con este propósito”, añadió el dirigente gremial.
Para el gremio, que se lleve a cabo esta iniciativa es símbolo de progresar en los 3 aspectos que tienen estancado al sector en el uso de biocombustibles, teniendo en cuenta que hay una reglamentación para el desarrollo sostenible de la actividad: el trabajo con el Gobierno, el diálogo con el sector transportador y el apoyo para construir infraestructura. (Lea: Colombia, estancada en Programa Nacional de Biocombustibles)
“Sin lugar a dudas existe una política nacional sobre el uso de biocombustibles, en aras de entender que estos hacen parte de la reserva estratégica. Existe además una reglamentación para el desarrollo sostenible que nos permite diseñar con el Gobierno un crecimiento de su uso en la medida en que las reservas de los hidrocarburos vayan bajando, creemos que es una necesidad, mientras exista la posibilidad de que las reservas de hidrocarburo sigan cayendo”, explicó Jorge Bendeck.
A 6,5 años de que las reservas de petróleo se acaben en Colombia, la mezcla en varias regiones del país sigue en 10%, no en 14% según las proyecciones, mientras que en Bogotá sigue siendo del 8%, es decir que el promedio nacional es de 9,2%. La medida se empezó a aplicar desde 2010 con el Conpes 3510. (Columna: Biocombustibles, sin reglas de juego)
¿Cómo se mezcla el biodiésel con el Acpm?
De acuerdo con Fedepalma, en este tipo de refinerías, una vez llega el aceite de palma crudo, se deja el producto listo para su comercialización. Luego, en las estaciones de gasolina la mezcla se realiza de manera simultánea, sin que el Acpm se vea afectado y la cantidad de biocombustible que se añade va de acuerdo con la reglamentación establecida desde el Conpes 3510.