Colombia debe continuar con su política de Precios Mínimos de Garantía (PMG) en apoyo a los ingresos de los algodoneros, pero sin comprometer la competitividad del cultivo, sostuvo Conalgodón en comunicación que hizo llegar al Gobierno Nacional. Según la Confederación Colombiana de Algodón, Conalgodón, la situación actual del mercado de la fibra es relativamente favorable, pues los precios internacionales se han estabilizado y la tasa de cambio ha aumentado en forma significativa. En estas condiciones, observa la dirigencia gremial, es más bajo el costo presupuestal que le demanda al Estado mantener el sistema de los PMG, por lo que insiste en que el mismo no debe ser desmontado. (Lea: Lanzan plan para impulsar siembra de 20 mil hectáreas de algodón) Conalgodón observa que en las 2 últimas semanas de agosto el valor de la compensación representó solo el 14 % del PMG. En dicho sentido, urge al Ministerio de Agricultura que anuncie con la debida anticipación los componentes de la política de protección de ingresos en la temporada 2016 para los productores de Cundinamarca, Huila, Tolima y Valle, cuya cosecha anual está ya finalizando con resultados satisfactorios en productividad y costos. Conalgodón respalda su posición en el más reciente estudio de subsidios que los gobiernos en diferentes regiones del mundo otorgaron en el último año a la producción algodonera. El documento, divulgado por el Comité Consultivo Internacional del Algodón (ICAC, por sus siglas en inglés), con sede en Washington, revela que durante la última campaña 2014/15 países algodoneros otorgaron apoyos por USD10 mil 400 millones, cifra record desde 1997 que por primera vez se inició este tipo de investigaciones. (Lea: Medidas del MinAgricultura dejan sabor agridulce en algodoneros) Según dicho estudio, los subsidios al algodón en el período 2014-2015 aumentaron en 60 % y cubrieron al 76 % de la producción mundial. Los apoyos fueron, en promedio, de 22 centavos de dólar por libra, es decir, un tercio del precio de referencia internacional, 66 centavos. El ICAC ratifica que los Gobiernos mantienen sus políticas de protección a los ingresos y que las profundizan cuando los precios internacionales caen. China e India, quienes representan cerca del 50 % de la producción mundial, mantienen un mecanismo de Precio Mínimo de Garantía y compras gubernamentales, y facilitaron el desarrollo de infraestructura productiva, modernización de desmotadoras, entrega de semillas con tecnologías, créditos blandos y subvenciones al costo del transporte. Adicionalmente, China mantuvo sus apoyos en frontera mediante cuotas y un arancel efectivo del 40% para las importaciones. Estados Unidos, con una participación del 13% en la producción mundial, y después de casi 90 años de apoyos directos al precio, empezó a re direccionar sus ayudas a través del ofrecimiento de seguros de cosecha al agricultor, y durante la campaña 2014/15 cobijó más del 90 % del área sembrada en el país. Con la firma de la nueva ley agrícola o Farm Bill en 2014, se diseñó para el algodón un mecanismo de aseguramiento denominado STAX que cubre los ingresos del productor, y que cobija tanto reducciones en rendimiento como variaciones negativas en el precio, y se activa cuando los ingresos esperados caen por debajo del 90 %, y el Gobierno subsidia el 80 % del valor de la prima. (Lea: Algodoneros aseguran que área de siembra se redujo por el mal clima) Brasil, con una participación del 5 %, enfoca sus ayudas en mantener un precio mínimo garantizado de venta para el agricultor, así como créditos subsidiados para la producción y mercadeo, donde los pequeños productores reciben tasas de financiación del 5 % cuando las tasas del mercado oscilan entre el 20-25 %. Los países algodoneros de la Unión Europea, especialmente Grecia y España reciben uno de los apoyos directos más altos del mundo por hectárea sembrada. Los resultados del Estudio del ICAC demuestran que el algodón nacional está en un mercado altamente distorsionado y muy alejado de la libre competencia, con el agravante de que el algodón en Colombia fue uno de los primeros productos agrícolas en obtener desgravación inmediata de aranceles con Estados Unidos desde finales de los años 90´s, antes de que otros productos comenzaran a hacerlo.