La pregunta es: ¿Semanarecibió el apoyo del G2 cubano en la elaboración del petardo mojado contra el candidato presidencial del Centro Democrático? Los análisis que hicieron varios especialistas del video que la revista de Felipe López Caballero lanzó a la opinión pública, como un hueso, para confundirla, una semana antes de la primera vuelta de la elección presidencial del 25 de mayo de 2014, demuestra que los artífices de ese embuchado obraron con precipitud, chapuceramente, y no contaron con la habilidad y determinación de los colombianos para desnudar esa nueva conspiración contra la democracia.
El examen más superficial de ese video muestra que Semana, antes de colgar en su página web ese video, lo adulteró: le incorporó textos y sonidos que este no tenía. Se supone que las frases incorporadas al video responden exactamente a frases pronunciadas por los personajes que aparecen allí. Sin embargo, eso no fue así. En el video hay frases del personaje que se parece a Oscar Iván Zuluaga que no son transcritas. Lo contrario también es cierto: agregaron textos y sonidos que Semana atribuye a Zuluaga aunque que las imágenes y gestos de este no coinciden con tales sonidos. Hay cortes en el video que fueron aprovechados para agregar sonidos y microgestos. Una gran parte de las frases atribuidas al supuesto “hacker”, Andrés Sepúlveda, no tienen respaldo en imágenes. En esas condiciones, los falsificadores le hacen decir cosas que él quizás jamás pronunció.
Al momento de escribir esta nota, el asesor jurídico de Oscar Iván Zuluaga duda hasta que el personaje que aparece en ese video, cuya imagen es congelada varias veces de manera curiosa, sea el Zuluaga de la vida real. A una revista bogotana el abogado Jaime Granados declaró: “La campaña del doctor Óscar Iván Zuluaga fue infiltrada ilegalmente. El video es ilegal y como tal no puede ser considerado como prueba en Colombia ni en ningún lugar civilizado. Fue editado, fue manipulado, y lo que nos interesa establecer con nuestros expertos, y lo pondremos en conocimiento de la Fiscalía para que ella llegue hasta el final en este caso, es determinar quién lo hizo, por qué lo hizo, quiénes están detrás de los que hicieron este montaje faltando ocho días para las elecciones presidenciales.” (Lea: “Video de la revista Semana se trata de un montaje barato”: análisis)
Jaime Granados recordó que Juan Manuel Santos se vió envuelto en el pasado en otro problema de manipulación de pruebas, en el caso del almirante Arango Bacci, de la Armada Nacional, quien tuvo que pagar años de cárcel por esa falsificación, antes de ser absuelto por la Corte Suprema de Justicia. El jurista señaló: “Se pudo establecer que no era la huella del almirante, correspondía morfológicamente a la de él pero había sido falsificada y puesta en un documento, y la Corte Suprema lo absolvió y determinó investigar entre otros al hoy presidente Juan Manuel Santos”.
Agregó que el montaje que algunos tratan de hacer valer contra el candidato presidencial Oscar Iván Zuluaga “coincide con el esquema de guerra sucia, de campaña negra, que hace el señor J.J. Rendón, [exasesor hasta hace unos pocos días de Santos] lo ha hecho en otros países como Panamá, Venezuela, México, etcétera”.
Oscar Morales Guevara, experto en temas informáticos, fue uno de los primeros en examinar punto por punto, imagen por imagen el cuestionado video. Morales detectó cada falsificación que contiene el video-montaje de Semana. Su estudio puede ser leído aquí:
Acerca del uso de la palabra “golpe” por parte de Oscar Iván Zuluaga, palabra que ha sido explotada de manera grotesca por Semana y por los propagandistas de la campaña de Juan Manuel Santos, Oscar Morales explica lo siguiente: “Zuluaga se refiere en el audio a un posible golpe de Santos y el Ejército contra las Farc, a manera de salvación de su imagen ante el país, pues [podría] mostrar orgulloso que el Gobierno está actuando de manera contundente contra la insurgencia terrorista y así ganar más apoyo electoral en las elecciones. Sepúlveda responde: ‘estamos esperando’, haciendo alusión a que muy posiblemente alguna fuente (desconocida) le informará cuando habrá un nuevo operativo de las FFMM contra las Farc.
Cuando dice ‘estamos’, es fácil entender que se refiere a los foros de inteligencia donde él participa y donde se comparte información pública sobre Farc. Revista Semana ha hecho un gran esfuerzo por vender la palabra golpe como de Zuluaga a Santos, pero el contexto de la conversación indica que se trataba de un golpe del Ejército Nacional a las Farc.”
Sin embargo, la intención de Semanafue muy torva, pues escribió y destacó esta frase: “Queda un mes para dar un golpe, hermano, le dice el candidato Zuluaga al hacker.” (Columna: Manipulación política)
La frase real del video dice lo contrario: “Queda un mes para él dar un golpe”. Oscar Morales anotó: “Semana agregó peyorativamente la palabra
‘hermano’, para darle más dramatismo. Típico del G2.” Esa palabra, en efecto, no existe en el video.
El periodista Mauricio Villegas Londoño, quien también analizó el video de Semana, subrayó: “Quedaría así evidenciado un complot en contra de Zuluaga porque no tiene sentido que la oficina que prestaba los servicios a la campaña video grabara de manera ilícita a su propio cliente para destruir a su propia empresa y poniendo en riesgo de cárcel a uno de sus empleados por obtención ilícita de sustento probatorio”.
Horas después de la puesta en línea de ese video, algunos periodistas, muy concertados entre sí, comenzaron a difundir la especie de que el candidato presidencial del uribismo pensaba “dar un golpe contra Juan Manuel Santos”, cuando, en realidad, la supuesta conversación, donde esa palabra aparece, apuntaba hacia un golpe de la fuerza pública contra las Farc. Los manipuladores parecían triunfar. Pero el ambiente se transformó en histeria pura, que alertó a la opinión, cuando algunos llegaron al extremo de pedir que Zuluaga se retirada de la campaña presidencial y otros, las más exaltados, exigieron la detención misma del candidato.
La Fiscalía no se atrevió a dar ese paso y el golpe lanzado contra Zuluaga se devuelve ahora contra los falsificadores, quienes deberán explicar a lajusticia, si la Fiscalía se digna respetar el debido proceso, por qué lanzaron como prueba contra Oscar Iván Zuluaga un falso positivo audiovisual tan fácil de demoler.
La otra pregunta es: ¿La Fiscalía violó la reserva del sumario al pasar clandestinamente aSemana un documento, el video llamado “de Semana”, que hacía parte de una investigación penal? Todo indica que sí. El diario El Tiempo informó que el 15 de mayo pasado, el español Rafael Revert “ingresó al programa de Protección de Testigos, después de entregarle a la Fiscalía el video que él mismo grabó de la reunión entre el candidato Óscar Iván Zuluaga y el hacker Andrés Fernando Sepúlveda.” Dos días después, Semana* puso en línea su video. ¿Fue éste una copia del recibido por la Fiscalía?¿Fue otro diferente? ¿Por qué Semana y la Fiscalía callan todo al respecto?*
¿Quién es pues el tal Rafael Revert, que El Tiempo presenta como “testigo protegido” de la Fiscalía y como un “español” que trabajaba con Andrés Sepúlveda. ¿Quién es ese personaje que traiciono así a su empleador? ¿Qué nacionalidad tiene ese tipo realmente? ¿Qué contactos tiene con Cuba?
Pues hay que saber que todo este lio del “hacker neofascista”, comenzó con una alerta de las propias Farc en Cuba. Estas pidieron ayuda al G2 cubano y días después la Fiscalía allanó en Bogotá un servicio de escuchas, disimulado pero perfectamente legal, del Ejército colombiano.
Semanas después, la Fiscalía arrestó a Andrés Sepúlveda y lo acusó de “violar secretos de Estado” por haber interceptado correos electrónicos de negociadores de las Farc en La Habana. Pero como esas comunicaciones no son ni pueden ser secretos de Estado, había que mostrar a Oscar Iván Zuluaga como instigador de un golpe de Estado contra Santos. Pero la mediocridad de los manipuladores hizo que ese avión también se fuera al suelo. Y la popularidad de Oscar Iván Zuluaga sigue creciendo.