El suadero es un tipo de carne grasa proveniente de la res que se encuentra pegada a la parte interior de la piel, y que contiene finas capas de carne. Es un pequeño corte que ha trascendido en el arte gastronómico gracias a una de las presentaciones culinarias más conocidas; los tacos de suadero. Y es que unos ricos tacos de esta carne son los ideales para la comida o cena y degustar de un platillo típico mexicano.
Pero ¿alguna vez has intentado hacer suadero casero?. Si eres una de las personas que se ha animado a cocinar este tipo de carne desde su casa y posiblemente no te ha quedado igual que unos clásicos tacos “callejeros”, el error que quizás se esté cometiendo es la forma de cocción.
Si quieres saber cómo preparar un suadero casero que no quede duro y sea del total agrado para tus comensales, con los siguientes tips podrás lograr una consistencia suave además de que va a tener todo el sabor posible para que al final puedas disfrutarlo en ricos tacos.
Uno de los tips infalibles para que el suadero no tenga una consistencia dura se debe a la forma de cocción, recuerda colocar suficiente agua para que la carne se ablande con forme pase el tiempo en el fuego.
Antes de cocinar la carne es importante que la dejes en un marinado con limón y sal por aproximadamente 40 minutos, esto permitirá que se vaya suavizando y a la hora de cocerla ya no esté tan dura. (Blog: La carne dura, ¿mejora su terneza con una cocción larga?)
Colocarle algunas hierbas aromáticas o sazonador para suavizar la carne, es una excelente opción que puedes usar en tu cocina para agregarle un sabor extra y que una vez listo, el suadero esté más suave que nunca.
Si eres a los que les gusta que el suadero esté bien frito, es importante que el poco aceite en donde realices la fritura sea nuevo y no se esté reutilizando. Además freírlo por un par de minutos, permite que tenga un buen sabor y un punto exacto de cocción. (Blog: El ABC para descongelar la carne y tener un asado rico y sano)
Es momento de poner a prueba estos tips y ver cuál de ellos es el método más indicado para llegar a una receta perfecta y una degustación de un rico suadero casero que no tenga una consistencia dura y al contrario de ello, sea un deleite para nuestro paladar.
Fuente: Gastrolaweb