Ganaderos de Puerto López están optando por producir caña y caucho

El municipio del departamento del Meta es una región en la que la agroindustria está en auge. Algunos productores pecuarios están optando por vender o arrendar sus fincas ganaderas o incluso abandonar la actividad para dedicarse a la producción de otros cultivos.   “A raíz de que los cultivos agroindustriales como la caña y el caucho han tomado fuerza en la región, los ganaderos han cambiado el uso de la tierra pasando de la producción pecuaria a la agrícola y esto ha generado una reducción de 25 mil cabezas del hato ganadero en los últimos 2 años”, aseguró Jaime Antonio Rangel, profesional en Gestión Productiva y Salud Animal del Fondo Nacional del Ganado, FNG, en Puerto López.   De acuerdo con el profesional del FNG, los productores aducen que han tomado esa decisión por cuestiones de rentabilidad porque la productividad de una finca pecuaria por hectárea en la región está entre $300 mil y $400 mil por año, mientras que el sector agrícola les ofrece cerca de $700 mil sin hacerr ningún tipo de trabajo. (Lea: Aspectos a tener en cuenta para no desistir de la actividad ganadera)   Rangel comentó que en Puerto López se encuentra ubicada Bioenergy, una de las mayores empresas de biocombustible del país y unaentidad que avanza en la construcción de un complejo industrial para la producción de alcohol anhidro (etanol) y energía eléctrica a partir de caña de azúcar.   Según el funcionario del FNG la empresa actualmente cuenta con cerca de 14 mil hectáreas de caña sembradas y requiere alrededor de 30 mil.   José Torres Palacio, pequeños productor del municipio en mención, aseguró que la producción de caña que están impulsando las grandes empresas ha afectado la actividad y tocando hasta el 80 % de las tierras que se dedicaban a la ganadería.   “La situación es preocupante porque el hato ganadero se reduce cada vez más y además el negocio de la subasta también se ha visto afectado, ya que con el paso de los meses son pocas las personas que quieren vender o comprar animales; la mayoría ya ha salido de ellos”, explicó preocupado Torres.   El pequeño ganadero de Puerto López mencionó que él ha permanecido firme con su vocación pecuaria, pero que muchos de sus colegas y conocidos han decidido vender o arrendar sus fincas para la producción de caña, por lo cual invita a aquellos que aún no lo han hecho a que se unan para no permitir que se acabe la actividad en la región. (Lea: De ganadero a empresario del campo)   Este medio se puso en contacto con Carlos Luque Barriga, presidente del Comité de Ganaderos de Puerto López, y este confirmó que es cierto que algunos productores están cambiando sus tierras por cultivos de caucho y caña y por otros como el arroz, el maíz y la soya.   Anotó que la Altillanura es una tierra prometedora para la expectativa que se tiene de convertirla en la despensa alimentaria del país. Señaló que la parte en donde empieza a construirse la agroindustria queda exactamente en Puerto López y que la región es una zona en donde el uso del suelo está cambiando a diario.   También dijo que posee una excelente estructura física y química y que además son terrenos que se pueden mejorar mediante enmiendas para obtener mejores resultados con los cultivos.   “El que es ganadero y le ha apostado a ser agricultor, nunca va a dejar su primer oficio. En mi caso, yo he utilizado predios ganaderos, para propósitos agrícolas y hoy he vuelto a poner animales allí. Yo pienso que el uso del suelo sí ha cambiado y que además en algunos casos la tierra ha cambiado de dueño”, sostuvo Luque.   El dirigente del gremio local precisó que no cree que los ganaderos estén abandonado en un 100 % la actividad, aunque pueden existir algunos casos. Remató diciendo que la labor agrícola mezclada con la pecuaria le parece una buena opción, porque los productores pueden adquirir nuevas ideologías, implementar buenas prácticas y empezar a ver los pastos como cultivos. (Lea: Mejorar la calidad del suelo: el secreto para ser agricultor y ganadero a la vez)