Con ayudas a medias, ganaderos de Filandia salen adelante

Hace 6 años, 43 productores de este municipio en Quindío se asociaron para presentar un proyecto de Alianzas productivas. Hoy en día, solo 11 continúan, pues los apoyos que reciben nunca llegan completos y desmotivó a los que optaron por retirarse.   Hernán Gómez, representante legal de la Asociación de Productores de Ganado Estabulado de Filandia, Aprograf, contó cuáles fueron los inicios de este proyecto en 2010.   “Comenzamos los 43 con una Alianza Productiva que fue prácticamente un fracaso. (…) En esa época cada uno recibimos $2 millones 400 mil que se fueron en hacer los establos y adecuar los potreros. Pero faltó lo más importante: la semilla del proyecto, que eran los ganados”, declaró. (Lea: Los $8.000 millones que nunca llegaron a Filandia)   De acuerdo con el productor, los beneficiados se vieron obligados a adquirir créditos con el Banco Agrario para poder hacerse con los animales. Sin embargo, como todos eran pequeños productores, muchos no pudieron con las cuotas y tuvieron que salir del proyecto.   Aunque la asociación lleva el nombre de ganado estabulado, los ganaderos de Aprogaf trabajan con sistemas semiestabulados en producción de carne y leche, esto quiere decir que mantienen los animales en potreros durante el día y los encierran a las 5 de la tarde.   A esa hora les brindan alimento para que hagan el proceso de digestión durante la noche y en la mañana los sacan al potrero. De esta forma, los bovinos se resguardan del frío y la lluvia, y aprovechan todos los nutrientes sin perder peso. (Lea: Tras asociarse, ganaderos en Quindío venden la leche $130 más cara)   “Este sistema es sobre todo para los pequeños productores porque pueden tener establos para todos sus animales. En ganaderías extensivas es más difícil, porque tendrían que hacer construcciones muy grandes y entrar y sacar los ganados”, explicó Gómez.   En 2014, los ganaderos decidieron presentar un proyecto de Pacto Agrario en repoblamiento bovino y mejoramiento bovino por un valor total de $260 millones, que incluía asistencia técnica, alimentos y transferencia de embriones Gyr x Holstein para producción de leche.   No obstante, el proyecto fue recortado y el Ministerio de Agricultura les asignó $178 millones, de los cuales aún faltan $20 por ser entregados. Según el representante de Aprogaf, esperan ese último desembolso desde enero y luego de 7 meses, no hay señales de que vayan a entregarlo.   “Éramos 16 y solo clasificaron los 11 que hoy estamos. Al día de hoy tenemos 45 novillas preñadas de las 55 que hacen falta, 5 por cada productor”, aclaró Gómez. (Informe: Avances del Pacto Agrario en materia ganadera son mínimos)   Sin dejar de reconocer el beneficio que recibieron por haber sido uno de los proyectos aprobados en el Pacto Agrario, el ganadero reprochó que el Gobierno no les hubiera ayudado con asistencia técnica, pues siente que quedaron a la deriva.   Por esta razón, se vieron obligados a contratar a técnicos y consultar amigos por su cuenta para comprar los vientres y aprender a cuidarlos, sin saber cómo alimentarlos.   “Al proyecto le recortaron la asistencia técnica porque el Ministerio solo dio plata para comprar animales. Nunca nos dieron explicación de por qué se hizo ese recorte. En este momento no nos han hecho el tercer desembolso porque dicen que no hay plata”, afirmó.   Si bien es cierto que los apoyos del Gobierno los han ayudado a fortalecerse, ese último impulso necesario para su consolidación es el que más les ha hecho falta. Debido a estos recortes, hoy en día solo cuentan con los 11 asociados admitidos dentro del Pacto Agrario.   De otro lado, Gómez reconoció que los productores se han acostumbrado a recibir subsidios y productos gratis, por lo cual algunos han optado por renunciar a la Asociación. (Lea: Proyectos ganaderos del Pacto Agrario, sin dinero para su ejecución)   “Todo el mundo quiere que le regalen y cuando empezaron a cobrarle a la gente, dijeron que no tenían. Por eso decidimos quedarnos con los del Pacto Agrario, que son los más juiciosos, porque algunos de los antiguos miembros no querían pagar la cuota mensual de $20 mil para el sostenimiento de la asociación”, señaló.   Aun así, Gómez y sus 10 colegas están dispuestos a continuar trabajando en laentidad, enfrentando las adversidades propias de la actividad y trabajando en más proyectos.   “Estamos mirando la posibilidad de montar un proyecto para construir invernaderos metálicos, porque los que tenemos son en guadua, solo duran 4 años y se pudren, entonces toca estarlos cambiando”, dijo.