Estas figuras del entretenimiento, a las cuales se les conocía por sus facetas actorales, vieron en el campo una alternativa a sus carreras artísticas y decidieron apostar por la producción de vacunos.
EL colombiano Mauricio Vélez encontró en la ganadería una nueva pasión. Después de una exitosa carrera como presentador y actor, Vélez se alejó de los reflectores y decidió invertir en el campo, un mundo que siempre le fue cercano debido a sus raíces llaneras.
En una entrevista con Laura Acuña, Vélez, con su estilo franco y cercano, le pone rostro humano al oficio ganadero al narrar con detalle cómo es un día típico en su vida en el campo. El ganadero arranca el día cuando muchos apenas están despertando.
“A las 5 y media, 6 de la mañana me levanto, me pongo unas botas, bajo a mirar si salió harta leche, si salió poquita, si va a llover, si no va a llover”, cuenta con naturalidad.
Su rutina ganadera está cargada de observación y decisiones constantes. Acompañado por su trabajador “don Luis” revisa los cultivos, por ejemplo si el maíz está invadido de hormigas y qué control biológico debe implementar para contrarrestarlas. La finca se convierte en un tablero de control en tiempo real donde cada detalle cuenta y cada día trae una nueva historia.
Y es que el trabajo no termina con el pasto o la leche. Vélez también se mete de lleno en el cuidado de los animales. “Estoy viendo la pata torcida, este ternero para acá. Tráigalo, llevémoslo a la mesa de cirugía”.
Ahí, con gafas y guantes puestos, se convierte en podólogo bovino, haciéndole pedicure a las vacas, limando con pulidora las pezuñas de los animales para que se paren de manera adecuada y repartan bien su peso. Pero no es solo estética; está preparando a sus animales para competir en ferias y medir su rendimiento con precisión.
Después de revisar las reses en calor y las que van a parir, cerciorándose de que todo esté bajo control, llega el mediodía. Pero justo cuando parece que puede relajarse un poco, lo golpea la realidad con una carcajada: “¿Qué hubo? El señor se acordó que tiene señora. (Hace gesto de llamada) Qué pena, mi amor”. Y, sin drama pero con picardía, suelta la frase que resume toda su jornada entre ganado, pasto, pedicure y hormigas: “No es que sea mujeriego, es que soy ganadero.”
También reveló que actualmente participa activamente en subastas como martillo, el encargado de dirigir las pujas. "Cuando voy de martillo a una subasta, tengo micrófono en la mano y canto pujas", explicó.
Pero la ganadería no es su única pasión. Además se ha adentrado en la herrería, en la cual ha recibido capacitaciones especializadas en Venezuela, e incluso ha incursionado en las terapias asistidas con caballos, buscando ayudar a las personas a superar miedos y mejorar su bienestar emocional a través de la conexión con estos animales.
"Los caballos tienen una energía especial que ayuda a sanar", aseguró el actor. Aunque su carrera en los medios fue exitosa, manifiesta que hoy se siente más pleno en el campo.
Henry Cavill: de 'Superman' a ganadero
El actor británico Henry Cavill, reconocido mundialmente por interpretar a Superman, sorprendió a sus seguidores con un giro en su vida profesional: ahora es ganadero.
Según informó Infobae, Cavill visitó varias granjas en A Coruña y Lugo, en España, donde quedó fascinado con la vaca ‘rubia gallega’, una raza autóctona apreciada por la calidad de su carne y su resistencia. (Lea en CONtexto ganadero: Yeison Jiménez: Más allá de la fama musical, el compromiso con la ganadería sostenible)
El actor decidió comprar 20 ejemplares para criarlos en su granja a las afueras de Londres. "Me hubiera gustado llevarme más, pero solo había 20 disponibles", confesó Cavill, quien está entusiasmado con este nuevo proyecto. Los precios de estas vacas oscilan entre los 2.500 y los 4.000 euros, lo que indica una inversión significativa por parte del actor.
Esta incursión en la ganadería no es casualidad. En varias entrevistas, Cavill expresó su amor por la naturaleza y la vida en el campo. Ahora, con su propio hato de rubia gallega, busca consolidarse en un sector que, aunque alejado de Hollywood, le resulta igual de desafiante.
Estos actores demuestran que cada vez más figuras públicas apuestan por el agro, y que la ganadería se perfila como una opción viable tanto para empresarios del sector, como para aquellos que buscan una forma de vida diferente.