Productores de Arauca están afectados por las inundaciones y desatendidos por el Gobierno

Eduardo Rodríguez era un ganadero del municipio de Arauca que abandonó la actividad porque su predio se inundó hace más de dos años y ni las autoridades nacionales ni locales han atendido su emergencia.

«Tengo una finca de 28 hectáreas que está inundada; se inundaron la casa y los corrales donde se mete el ganado. Me tocó salir, sacar los animales y no hay nada. Las cosas de valor que se pueden dañar las levantamos, pero en cuanto a producción, ya no hay nada, no hay cerdos, no hay gallinas, no hay pollos. Tenía una lechería pero me tocó sacar el ganado. Estamos sufriendo unas consecuencias terribles», relató.

El antiguo productor contó que su predio quedó cubierto por el agua debido al rompimiento de un dique del río Arauca en octubre en 2018. Como nunca se solucionó el problema, cuando llegó el fuerte invierno, su terreno que está cercano al río se anegó hace dos años. (Lea: En Arauca, inundación de fincas obliga a vender el ganado flaco)

«Más o menos hizo un hueco de 50 metros y en este momento ya van 300 metros porque ha seguido rompiéndose, por eso estamos inundados. Este año que tenían que haber arreglado eso, no lo hicieron. (…) Nos inundamos porque llueve hacia la parte alta, hacia Tame y Saravena y el río baja hasta donde estamos nosotros que es Arauca capital y zona aledaña a la ciudad», develó.

El antiguo ganadero contó que no tuvo forma de movilizar a sus animales y prefirió venderlos, abandonando cualquier actividad pecuaria que ejercía antes de las inundaciones. Por ahora no sabe cuándo retomará la producción de leche o la cría de otros animales.

De acuerdo con Rodríguez, hay por lo menos 60 familias, dueñas de un terreno de una hectárea o media hectárea, que están afectados por esta misma situación. Una de ellas es Milena Duque, antigua vecina de Rodríguez, que arrendaba su finca para eventos pero el terreno se inundó hace 15 días y no solo tuvo que cancelar a varios clientes, sino que se vio obligada a abandonar el que también era su lugar de residencia.

«He tenido que cancelar varios alquileres y en general, lo que son las cabañas, los enseres que manejo, se han dañado por el agua. Es un problema que no es esporádico sino que ya sabemos que cuando comienza el invierno, vamos a sufrir por esto», aseguró.

La propietaria de la finca contó que tuvo que irse a vivir donde una de sus hijas mientras cede la anegación, que se debe justamente a la ruptura del dique, como le sucedió a Rodríguez. Tan pronto como empezó a crecer el río hace dos semanas, las aguas se colaron a su predio y no lo han abandonado.

Según Rodríguez y Duque, las autoridades han sido indiferentes ante este problema, pues llevan varios años solicitando una reparación del dique pero sus clamores llegan a oídos sordos. (Lea: Arauca vive su peor invierno de los últimos 12 años, según ganaderos)

«Cada vez que llueve, hacen el censo y dan mercados y colchonetas que puede que para muchas personas sirvan, pero en mi caso, que se me han dañado sillas y otros elementos que uso para los alquileres, no es lo mucho lo que me pueden ayudar. Ellos prometen que lo van a arreglar pero cuando llega el verano, que se pueden hacer las obras, no hacen nada», lamentó Duque.

Por su parte, Rodríguez contó que le han reclamado al alcalde de Arauca, Édgar Fernando Tovar, sin encontrar respuesta, mientras que han tenido dificultades para elevar sus peticiones a la Gobernación debido a los problemas de inestabilidad política, pues el gobernador elegido fue destituido e inhabilitado.

«Hay un gobernador encargado (Wilinton Rodríguez Benavidez) que nos visitó y estuvo en el sitio del problema, del rompimiento del dique. Visitó la vereda y se dio cuenta que todos estamos inundados, y muchas familias han abandonado su casita. En cambio, el alcalde brilla por su ausencia en este sector», añadió.