¿Qué dicen los índices reproductivos en una ganadería, más allá de las metas tradicionales?
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Por CONtexto ganadero - 14 de Julio 2023
La administración de un predio agropecuario, más que una acción es una decisión que debe tomar el productor de manera consciente y determinada. A continuación encontrará un informe detallado de todo lo que debe saber sobre este tema.
Para ser más específicos, hay que partir que la administración de una finca ganadera es de suma importancia por diversas razones, teniendo en cuenta que unas van desde la parte operativa, pasando por el lado ambiental y económico, hasta los aspectos normativos. (Lea en CONtexto ganadero: Cómo administrar fincas ganaderas)
Entrando un poco en materia, la administración es fundamental para la eficiencia operativa de una finca agropecuaria debido a que permite optimizar los recursos disponibles como la tierra, el agua, los alimentos y los insumos.
A través de una planificación estratégica, una organización eficiente, una dirección efectiva y un control constante se pueden maximizar los resultados productivos y minimizar los costos, lo que lleva a una mayor eficiencia operativa.
Esta administración también ayuda a lograr una gestión financiera sólida en la finca ganadera debido a que la planificación financiera, la gestión de costos, el análisis de rentabilidad y la toma de decisiones basadas en datos, contribuyen a generar ingresos estables y a maximizar los márgenes de beneficio, siendo esto esencial para la sostenibilidad económica y la viabilidad a largo plazo de la finca.
En ese orden de ideas y pasando a otros aspectos clave del predio, la administración adecuada de la finca tiene un impacto directo en el bienestar de los animales, debido a que un ganado bien cuidado y manejado en condiciones adecuadas tiene un mejor rendimiento, una mayor resistencia a enfermedades y una mejor calidad de vida.
El productor debe tener en cuenta que la implementación de prácticas de manejo adecuadas, programas de alimentación balanceados, cuidado de la salud y manejo del estrés contribuyen al bienestar animal, lo que, a su vez, tiene un impacto positivo en la productividad y la calidad de los productos ganaderos.
Además, la administración responsable de una finca implica considerar el impacto ambiental de las actividades, pues la adopción de prácticas sostenibles como el manejo adecuado del pasto, la gestión de residuos, la conservación del suelo y la protección de recursos naturales, es esencial para mitigar los efectos negativos en el entorno.
En ese orden de ideas, la administración de una finca va de la mano con el cumplimiento de regulaciones y requisitos legalesestablecidos por las autoridades competentes. Esto abarca desde temas relacionados con la sanidad animal y la trazabilidad hasta el cumplimiento de normativas laborales y de seguridad. (Lea: ¿Sabe cómo llevar a cabo un proceso administrativo en su finca?)
Basado en estos aspectos importantes, el productor debe tener claro cuáles son los fundamentos básicos de la administración de una finca ganadera basados en estos aspectos que se complementan entre sí:
1. Planificación: Implica establecer metas y objetivos claros para la finca y desarrollar un plan estratégico para alcanzarlos. La Universidad Nacional de Colombia publica un manual llamado ‘Administración de fincas’ en el cual se dice que muy el proceso de la planificación debe ser abordado por etapas sucesivas, no diferenciadas estrictamente entre sí.
La planificación también incluye la identificación de posibles riesgos y la formulación de estrategias para minimizarlos.
2. Organización: Implica una estructuración de la finca de manera eficiente y efectiva. Esto quiere decir, asignar responsabilidades y tareas a las personas involucradas en la operación de la finca, establecer líneas de comunicación claras y definir jerarquías y relaciones laborales.
3. Dirección: Quiere decir la gestión del personal y el liderazgo en la finca, que implica motivar, guiar y supervisar a los miembros del equipo para que trabajen en conjunto hacia el logro de los objetivos establecidos.
4. Control: Se refiere al monitoreo y la evaluación de las actividades en la finca ganadera para asegurarse que se estén logrando los objetivos establecidos. Implica determinar indicadores clave de rendimiento, realizar seguimientos regulares, recopilar datos relevantes y comparar los resultados reales con los objetivos establecidos.
Existes muchas acciones que el productor puede llevar a cabo en su finca, pero hay cuatro aspectos claves en los que debe ir encaminado este accionar:
Gestión del ganado: Se deben realizar acciones en pro del registro y seguimiento detallado de cada animal incluyendo datos como raza, edad, historia de salud, reproducción, etc.
Es indispensable además, una planificación en la reproducción que se ajuste a los objetivos de la finca, que va de la mano con el manejo del inventario, es decir, el recuento regular del ganado para evaluar su cantidad y calidad, así como el manejo de la alimentación de los mismos, establecimiento un programa de alimentación balanceada para satisfacer las necesidades nutricionales del ganado en cada etapa de su ciclo de vida.
Manejo del pasto y el forraje: Son acciones enfocadas en la rotación de potreros, de tal forma que se pueda establecer un plan de rotación para permitir que el pasto se recupere entre pastoreos. Además, de la mano de esto, debe haber un monitoreo y fertilización periódico del suelo para determinas su fertilidad y así pasar a una siembra y reforestación, haciéndolo de forma estratégica con pasto de alta calidad y leguminosas forrajeras para mejorar la productividad y diversidad del pastizal.
Salud y bienestar animal: Este aspecto está enfocado en acciones en pro de la sanidad del animal, realizando actividades y programas de vacunación para prevenir enfermedades comunes en al ganado. Asimismo, hacer un manejo sanitario que implica prácticas de higiene y bioseguridad, como el control de plagas, desinfección de instalaciones y equipos, etc.
A esto hay que sumarle que debe haber un manejo del estrés, proporcionado por un entorno cómodo y seguro para el ganado. Esto se hace ofreciendo sombra, agua y refugio adecuados.
Administración financiera: Como productor formal, debe organizar su área financiera y no mezclar lo laboral con lo personal, razón por la que es recomendable organizar un presupuesto que incluya ingresos y gastos esperados, así como un seguimiento regular de los costos de producción.
En este proceso, es clave llevar un registro preciso de todos los ingresos y gastos relacionados con la finca, así como hacer un análisis de rentabilidad en el cual se evalúe regularmente la rentabilidad de la finca, considerando factores como los precios del mercado, los costos de producción y la eficiencia del negocio. (Lea: Colombia tiene falencias en administración de fincas ganaderas)
Finalmente, el productor debe recordar que estas acciones debe adaptarlas a las características específicas de su finca y a las condiciones locales. Además, es recomendable buscar asesoramiento profesional como veterinarios, agrónomos o contadores para obtener orientación especifica y experta en cada área.
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