La reducción de costos en ganadería sin comprometer la salud y el rendimiento de los animales necesita de estrategias y prácticas eficaces que puedan ayudar a los ganaderos a optimizar los recursos y mejorar la rentabilidad de su negocio.

Miguel Sánchez Flores, médico veterinario, explica que la ganadería tiene muy pocas utilidades en algunas ocasiones, “especialmente cuando se está empezando en el negocio. Es en este momento cuando los costos nos devoran, y muchas veces, en vez de ganar dinero se pierde”. (Lea en CONtexto ganadero: Cuáles son los costos esenciales para iniciar a trabajar en ganadería)

Por esta razón, el profesional se enfoca en cinco áreas clave: alimentación adecuada, medicina preventiva, mejora genética, y optimización de la reproducción y los registros.

Optimizar la alimentación: Este aspecto representa uno de los mayores costos en la ganadería, por lo que ajustarla correctamente según las necesidades nutricionales de los animales es fundamental para evitar gastos innecesarios.

De acuerdo con el profesional, cada etapa de desarrollo del ganado (cría, crecimiento, engorde y lactancia) requiere de una dieta específica que asegure un adecuado aporte de nutrientes. Por lo tanto, proporcionar una dieta equilibrada en proteínas, energía, minerales y vitaminas evita el desperdicio de recursos y ayuda a los animales a alcanzar su máximo potencial de crecimiento y producción.

Sánchez Flores afirma que “la alimentación representa aproximadamente el 60% de los costos, siendo muy conservadores y optimistas”.

Medicina preventiva: Según el experto, cuando los productores vacunan adecuadamente los bovinos y se tiene un programa de medicina preventiva, “el ganado se va a enfermar menos, por lo que se gasta menos en médicos veterinarios y medicamentos. Además, claramente se tendrá menos mortalidad en el ganado, ahorrando mucho dinero”.

Al reducir la incidencia de enfermedades, disminuye la necesidad de tratamientos costosos y de pérdida de productividad, lo que representa un ahorro a largo plazo.

Mejora genética: La selección genética orientada a mejoras la producción de leche, carne, o resistencia a enfermedades contribuye a una ganadería más eficiente y menos dependiente de insumos adicionales.

Sánchez Flores asegura que “con un ganado de buena genética se va a tener los rendimientos que se deseen, además de bajar los costos. Un animal de buena genética va a ser más eficiente en la alimentación, por lo que para producir un kilo de carne o un litro de leche, va a necesitar menos kilos de alimentos.

Optimización de la reproducción: Una buena gestión reproductiva permite tener una producción constante y planificada, lo que reduce la dependencia de comprar de ganado externo y asegura un flujo estable de ingresos.

“Hay que tener casi como regla el tener un ternero al año, porque de lo contrario se está perdiendo dinero debido a que se tienen vacas que no son productivas”, detalla Sánchez Flores.

Llevar registros detallados: El profesional señala que este aspecto junto con la alimentación, son los más importantes. La implementación de registros permite realizar un seguimiento preciso de cada animal, desde su nacimiento hasta su productividad en cada ciclo. Esto facilita la toma de decisiones informadas en cuanto a la selección de reproductores, el manejo de la alimentación, y la prevención de enfermedades. (Lea en CONtexto ganadero: Cuáles son los 7 costes de una empresa ganadera)