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Dentro de las últimas investigaciones realizadas desde Fedegán – FEP sobre el sector lácteo, llama la atención que han ido apareciendo en las compras colombianas algunos productos que dicen llamarse “leche”, “quesos” y “yogures” producidos con insumos que no son derivados de la leche animal, sino de grasas vegetales, como la soya.
Estos productos denominados “análogos” tienen composiciones nutricionales diferentes a los lácteos, por supuesto partiendo que la proteína animal y la de origen vegetal difieren en su composición química, especialmente de aminoácidos esenciales que el organismo no produce y que necesita; que para el caso de la proteína vegetal son deficientes.
Dichos productos se hacen llamar igual que los derivados lácteos como yogurt y queso, sin embargo, en Colombia hay que tener en cuenta que existen las recomendaciones del “Codex Stan 206 – 1999”, el cual establece que un producto lácteo es “un producto obtenido mediante cualquier elaboración de la leche, que puede contener aditivos alimentarios y otros ingredientes funcionalmente necesarios para la elaboración.”; así mismo define leche como “la secreción mamaria normal de animales lecheros obtenida mediante uno o más ordeños sin ningún tipo de adición o extracción, destinada al consumo en forma de leche líquida o a elaboración ulterior”, por lo tanto no se pueden considerar productos lácteos, ni mucho menos llamarse leche o queso.
El sector, además de sufrir del incremento de las importaciones de productos lácteos en los últimos 3 años, se está viendo enfrentado a importaciones de productos análogos a los lácteos provenientes de México y Estados Unidos, los cuales son usados como sustitutos, por ejemplo para la preparación de pizzas sin informarle al cliente; lo que en la práctica es un engaño. (Lea: Colombia, segundo país más caro para producir leche en América)
Esta es una situación que ya han vivido otros países, por ejemplo los centroamericanos, donde el aumento en la comercialización de productos análogos a los productos lácteos afectó el sector y por ende, los productores lecheros elevaron sus voces frente a la necesidad de contar con una normativa regional, mediante la cual se armonizaran criterios y parámetros técnicos para los lácteos. [1]
Así mismo, la entidad de Administración de Alimentos y Drogas de Estados Unidos en su lista de definiciones de productos básicos, enumera los productos lácteos e indica que estos no incluyen pudines, productos no lácteos y quesos análogos, los cuales están categorizados como “otros”. [2]
Por ello, se hace necesario pedir al gobierno nacional acciones ante esta situación, protegiendo al consumidor y a la producción láctea colombiana, con una reglamentación que evite confusiones al momento de compra, y con la cual se pueda diferenciar fácilmente los productos lácteos de aquellos denominados análogos, tanto en sus propiedades físicas, microbiológicas, nutricionales, como en precios. (Lea: Importación de alimentos de EEUU creció 81% el primer semestre)
[1] Oficina del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura - IICA - en Costa Rica. Boletín Informativo N° 17. http://www.iica.int/Esp/regiones/central/cr/Documents/BOLETIN-CR.pdf
[2] Reportable Food Summary Report. RFR Commodities Definitions. USDA. http://www.fda.gov/downloads/Food/ComplianceEnforcement/UCM211534.pdfDentro de las últimas investigaciones realizadas desde Fedegán