¿Qué es la ganadería ecológica? ¿qué diferencias existen, realmente, entre la ganadería ecológica y la ganadería convencional? ¿realmente la carne ecológica sabe mejor? Aspectos que debe tener en cuenta.

¿Qué es la ganadería ecológica?

La ganadería eco es un método de producción ganadera, unido a la tierra, que tiene como principales objetivos garantizar la salud de los consumidores, el bienestar animal y la protección del medio ambiente. Los tres pilares fundamentales de la ganadería ecológica son los siguientes:

1. Ayuda a conservar el medio ambiente y el entorno natural. ¿Cómo? Manteniendo el medio físico en el que se encuentran las explotaciones ganaderas, sin contaminar el medio ambiente. Se busca, además, aumentar la fertilidad natural del suelo y fomentar la biodiversidad. En este tipo de ganadería se toma como base el aprovechamiento racional de recursos por parte de razas de animales autóctonos. Y la carga ganadera se adecúa para evitar impactos negativos en el medio ambiente.

En cuanto a la selección de razas, debe ser acorde a los principios de la producción ecológica, dándose preferencia a las razas y estirpes autóctonas.

1. Se respeta el bienestar y la protección animal. En las fincas de ganadería ecológica se facilitan las condiciones de vida necesarias para los animales tengan un desarrollo vital adecuado, evitándoles sufrimientos, daños y molestias innecesarias a lo largo de su vida. Además los animales son aturdidos antes de su sacrificio.

2. Es una ganadería libre de sustancias químicas. No se medica a los animales para que engorden más, y tampoco se utilizan fertilizantes o aditivos para obtener o preparar los alimentos que debe consumir el ganado.

En la ganadería ecológica, además, no se altera genéticamente a los animales para lograr una mayor producción. Los animales nacen y mueren lo más naturalmente posible, imitando al máximo el modo de vida que podrían tener en libertad, respetando siempre sus ciclos naturales.

Una ganadería que garantiza el bienestar animal

Como suele decirse, somos lo que comemos. Consumir productos ecológicos, como la carne ecológica, trae diversos beneficios para la salud ya que se trata de productos libres de contaminación.

Las carnes ecológicas se conservan con más facilidad que la carne procedente de la ganadería convencional, ya que la que viene de la ganadería ecológica tiene más Omega 3 y menos grasas saturadas de origen animal.

¿Por qué ocurre esto? Sencillamente porque los animales tienen una mejor calidad de vida, disfrutan de una mayor movilidad y no se puede estabular al ganado. En la mayor parte de explotaciones ganaderas ecológicas el ganado tiene acceso permanente a espacios al aire libre, fundamentalmente prados.

Respecto al sufrimiento animal, el atado y las mutilaciones solo son posibles si son permitidas por las autoridades competentes, y bajo ciertas condiciones como enfermedad del animal en cuestión.

También se prohíbe la reproducción con hormonas u otras sustancias con efectos similares, salvo en casos de tratamientos veterinarios para animales muy concretos.

En definitiva, ¿por qué hay que apostar por la ganadería ecológica? Básicamente porque es buena para el medio ambiente, ayuda a cuidar el entorno natural, potencia la economía local, respeta el bienestar y la protección animal y es mejor para la salud que la ganadería convencional.

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