Es importante que Colombia recupere su presencia en el mercado venezolano

A propósito del reciente relanzamiento de las relaciones entre Colombia y Venezuela, CONtextoganadero habló con Magdalena Pardo, presidenta de la Cámara de Comercio Colombo-Venezolana, para quien nuestro país debería trabajar en lograr posicionarse como el principal proveedor de la nación vecina en temas tan importantes como las manufacturas y los alimentos.

Para Pardo, la reactivación de las comisiones binacionales será fundamental en la búsqueda de lograr concertar asuntos como las deudas atrasadas en pagos, la vigilancia en zonas de frontera y la definición de nuevas formas de comercio entre ambas naciones.

CONtexto ganadero (CG): ¿Los anuncios de  mejoramiento de relaciones bilaterales son realmente efectivos para el comercio entre los 2 países?

Magdalena Pardo (MP): Cuando uno habla de Venezuela siempre tiene que mirar dos esferas, la política y la comercial. En este momento es bien interesante lo que ha pasado porque ha habido una reanudación de las políticas que se habían afectado a raíz del encuentro entre el presidente Santos y el excandidato Capriles, que generaron un distanciamiento y a partir del 21 de junio que se reunieron los presidente se relanzan esas relaciones, dando inicio a comisiones bilaterales en diferentes temas.

Desde entonces ha habido muchas reuniones y resultados interesantes, como un acuerdo de transporte que ya se acordó a nivel técnico, enviar el acero sin arancel y la inauguración del paso de la frontera Arauca – Guasdualito, volverlo un paso internacional. (Lea: Colombia y Venezuela llegan a acuerdos para comercializar alimentos)

Hay muchas señales positivas, pero aunque hay una reanudación de las relaciones políticas, en el comercio tenemos una situación  que no va tan bien, comparado con el año pasado. El año pasado las exportaciones colombianas a Venezuela crecieron un 58% con respecto a 2011 y este año en el primer semestre tuvieron una caída del 4 %.

De igual manera las exportaciones procedentes de Venezuela que el año pasado crecieron un 10%, este año para el primer semestre muestran una caída del 35%, esto porque Venezuela está creciendo menos, por una decisión de ajuste económico y también porque no tiene todas las divisas de antes para seguir importando.

CG: ¿Qué ha pasado con la deuda pendiente del Gobierno venezolano con los empresarios colombianos, que completa ya casi 5 años?

MP: Es cierto y no es cierto eso. Hay deuda vieja que todavía está pendiente de pago, tenemos USD1.000 en ese concepto que se pagó de un total de USD1350 y hay otra deuda vieja, alrededor de USD 150 que siguen pendientes por pagar. (Lea: Empresarios colombianos, a la expectativa de la situación en Venezuela)

Esa deuda es sobre la que ha insistido el Gobierno colombiano que se sienten a estudiar en las mesas, caso por caso para que sea reembolsada, pero evidentemente hay un saldo pendiente.

CG: ¿Las relaciones políticas actuales siguen siendo sensibles como lo fueron durante la última etapa de Uribe-Chávez?

MP: Yo creo que la relación política con Venezuela es muy sensible de todas maneras porque estamos con el nuevo Gobierno del presidente Maduro y el último desencuentro evidencia que hay una sensibilidad y el cuidado que se debe tener con la relación.

CG: A pesar del evidente desabastecimiento de alimentos ¿Por qué la renuencia del Gobierno venezolano para importar carne colombiana y esa preferencia hacia los animales vivos?

MP: Venezuela sigue importando carne colombiana, lo que pasa es que lo que quisiera Colombia, hasta donde yo tengo conocimiento, es exportar carne con valor agregado y lo que Venezuela busca es importar vientres y ganado en pie para procesarla.

Hoy en día lo que busca el vecino país es desarrollar cadenas productivas y por ese motivo ellos dicen que prefieren llegar a tener su propio ganado.

Sin embargo, en las mesas agrícolas binacionales se ha llegado a unos acuerdos en los que el Gobierno de Venezuela se ha comprometido a comprar carne de ambos tipos, pero la operación se interrumpió luego del encuentro Santos – Capriles. (Lea: Venezuela pone trabas a importación de carne, sin importar desabastecimiento)

Por lo pronto hemos sido informados de que el Gobierno de Venezuela  otorgará licencias a aquellos exportadores que tengan frigorífico, entonces vemos ahí una convergencia entre lo que quieren los exportadores colombianos de Fedegán y el Gobierno de Venezuela. No sabemos la fecha en la que se pondrá en práctica, pero para resumir: es muy importante que ahora que se pondrán estas mesas binacionales, Colombia pueda presentar su oferta de carne en canal y con valor agregado.

CG: ¿Qué medidas bilaterales se han trabajado de cara a combatir el tema del contrabando?

MP: Pues mire, hasta esa nueva etapa de acercamiento y de reactivación de esas mesas binacionales era un tema que cada país trataba por su lado. La aduana venezolana actuaba por su lado y lo mismo hacía la colombiana. (Lea: Contrabando venezolano enciende alarmas en agricultores colombianos)

Todos sabemos que el contrabando tiene cómplices a ambos lados de las fronteras y que sin una colaboración estrecha por parte de las autoridades no se puede hacer nada. Esa coordinación se está dando ahora mismo y es de esperar que se generen resultados más pronto que tarde, pero es evidente que sí  hay un problema muy importante en la manera como se ha ilegalizado ese mercado de la carne y se hace importante recuperar esa legalidad.

CG: ¿En qué van los avances que permitirían a Venezuela abastecer de gasolina la zona fronteriza?

MP: Esa provisión que hacía el Gobierno de Venezuela a las estaciones de gasolina de la frontera se había interrumpido a finales de mayo y se ha reanudado, o por lo menos ese fue el compromiso que se hizo en las mesas binacionales: reanudar la provisión de esa gasolina en frontera.

En el momento que tiene lugar esta entrevista estamos en medio de un paro en la frontera de Paraguachón, esto porque PDVSA surte de gasolina a unas comunidades de La Guajira, para que a su vez estas comunidades se la venda a cooperativas colombianas, y el precio interno al cual se les está vendiendo aumentó en una suma que a nosotros nos parece ridícula, que es pasar de 2 a 6 bolívares el litro, cuando eso para nosotros es un precio absurdo. (Lea: Bloquean frontera con Venezuela por freno a ingreso de gasolina)

En este momento tenemos ese problema y las autoridades venezolanas están esperando lograr negociar con estas comunidades para que dejen pasar los camiones. Pero en términos generales se ha reactivado la venta de combustible en la frontera por parte de Venezuela.

CG: ¿Cómo se han visto afectados nuestros productos en ese comercio bilateral, como consecuencia de la devaluación del bolívar?

MP: Mire ahí hay un fenómenos muy complicado y volvemos otra vez al tema del contrabando. Usted sabe que Venezuela subsidia todos los productos de primera necesidad. Hoy en día el Estado venezolano es responsable del 40% de las importaciones que hace Venezuela del mundo. Esas importaciones son productos de primera necesidad: hablamos de alimentos, de productos de higiene personal y eso lo importan a precios del mercado internacional, pero cuando las ponen a circular en el mercado internacional lo hacen a precios muy subsidiados.

Por lo anterior muchos de esos productos se vuelven muy baratos y por lo mismo muy atractivos para el comercio ilegal, entonces se arman unas mafias contrabandistas que se traen los productos subsidiados de Venezuela a través de la frontera y se distribuyen en Colombia; por eso usted puede encontrar una serie de productos que compiten con la producción nacional. (Lea: Venezuela, la razón del aumento de las exportaciones en junio)

Todo eso afecta por un lado toda la política de subsidios que tiene Venezuela para los estratos populares y al mismo tiempo se le introduce una competencia desleal a la producción colombiana y eso es un problema grave, que afecta especialmente a las zonas de frontera porque hace que los productos colombianos pierdan su competitividad.

Entonces en este tema, la coordinación de las autoridades para controlar el tema es muy importante que sea efectiva.

CG: ¿En algún momento se ha visto afectado el clima de negocios por la inseguridad fronteriza?

MP: Yo creo que el clima de negocios se ha visto mucho más afectado por las condiciones económicas que por un tema de seguridad, pero por supuesto que ese es un tema my importante.

Pero si usted conecta el tema de la seguridad con el tema del comercio ya la cosa es distinta, porque allí hay temas tan delicados como los desplazados en la frontera, con lo cual la cámara no tiene que ver directamente porque no le hacemos seguimiento.

En lo que concierne al tema comercial es mucho más en la frontera como le digo el tema del diferencial de precios, que ha afectado mucho la actividad económica en ambos lados de la frontera y el del contrabando, definitivamente sí. (Columna: Devaluación y Comercio con Venezuela)

La gente que tenía sus negocios en la frontera se ha visto perjudicada, de ambos lados. Escasean alimentos que antes encontraban del otro lado. También se han generado unas bandas de contrabando muy poderosas.

Mire, yo creo que lo más importante es que Colombia recupere su presencia en el mercado venezolano.

CG: ¿Qué proyectos hay en la agenda para este último año del Gobierno Santos entre los dos países?

MP: Actualmente somos los cuartos proveedores de Venezuela. Primero está Estados Unidos, después China, viene Brasil y seguimos nosotros. Realmente deberíamos ser los primeros en manufacturas y en alimentos y recuperar ese espacio. Una manera de hacerlo, en un contexto en el que Venezuela está escasa de dólares para poder comprar, y es una de las banderas que tiene la cámara colombo venezolana hoy en día, es crear sistemas alternativos de pago.

Esto quiere decir que Colombia pueda hacer operaciones comerciales en pesos y bolívares, o intercambio compensado, exportaciones nuestras contra petróleo o productos que necesitemos contra los que ellos requieran. (Lea: Ganaderos de Magangué quieren conquistar el mercado venezolano)

Como Cámara creemos que es viable diseñar un mecanismo que permita ese intercambio compensado de bienes. Por ejemplo si yo quiero venderle a Venezuela insumos eléctricos, me lo puedan cambiar por acero o aluminio. Otro ejemplo si mando azúcar en un barco que ese mismo barco se devuelva con úrea, que es un insumo muy importante en la producción agropecuaria.

Lo bueno es que en esta reanudación de las comisiones binacionales los ministros de Hacienda y los presidentes de los bancos centrales se han reunido para estudiar mecanismos como el intercambio en monedas nacionales o el de productos. Creo que ese es un reto para este año que nos permitiría a los colombianos volvernos a posicionar en el mercado venezolano.