En Santander, mujeres trabajan con especies forrajeras locales para animales y humanos

El desarrollo tecnológico, cambio climático, nuevas demandas por alimentos con atributos socio ambientales específicos y el cambio demográfico, son solo algunos de los factores que transforman los sistemas agroalimentarios y a los cuales las familias rurales deben adaptarse.

En ese orden de ideas y con el propósito de contribuir al fortalecimiento de capacidades y empoderamiento de la mujer rural en el municipio de Los Santos – Santander se está ejecutando el proyecto denominado ‘Chicamocha Emprende Rural’, apoyado y financiado por la Cámara de Comercio de Bucaramanga en alianza con Agrosavia.

El proyecto surgió tras la identificación de la necesidad de incorporar tecnologías para mejorar la productividad agropecuaria y la agricultura familiar, además de la necesidad de apertura de espacios donde se fortalezca el empoderamiento de la mujer rural y las relaciones con otros grupos y actores locales.

La mujer beneficiada en este proyecto es cabeza de hogar de la parte baja del municipio de la ecorregión del Chicamocha, las cuales vienen trabajando en el fortalecimiento de su seguridad alimentaria, y emprendimientos locales, por medio del aprovechamiento de la agrobiodiversidad que ofrece el bosque seco tropical en el cañón del Chicamocha, sobre todo con el uso de especies forrajeras locales.

Patricia Ponce de León, integrante de la Fundación Guayacanal, dice que “la ejecución del proyecto permitirá el reconocimiento y validación de la información que durante años han trabajado de la mano con la comunidad. Los resultados de las evaluaciones que se realizarán a especies forrajeras locales priorizadas por las mujeres de la zona permitirán direccionar el desarrollo económico en un sentido más acorde con la oferta ambiental del territorio”. (Lea en CONtexto ganadero: Las mujeres se abren un espacio y dejan huella en el campo)

Uno de los objetivos de este proyecto es identificar el potencial de especies forrajeras locales utilizadas en la alimentación humana y animal, para lo cual se viene llevando a cabo espacios participativos para identificar, priorizar y realizar la colecta de muestras de los principales recursos forrajeros, y otros recursos alimenticios priorizados para sistemas productivos bovinos, ovino – caprinos, y para la elaboración de alimentos para humanos.

De acuerdo con la investigadora de Agrosavia Clara Viviana Rua, “el proyecto es una iniciativa en la cual se combina la socialización y vinculación de la oferta tecnológica de Agrosavia en ganadería de pequeños rumiantes con la transversalización del enfoque de género y el emprendimiento rural, buscando así disminuir las brechas de género y lograr un real impacto de la ciencia, la adopción social del conocimiento y la tecnología en la calidad de vida de las mujeres y familias rurales organizadas a través de la Fundación Guayacanal en Los Santos. (Lea en CONtexto ganadero: (VIDEO) Lo que aportan las mujeres a la empresa ganadera)

Dentro de las principales especies locales utilizadas para diversos fines se ha identificado el nopal, la moringa, el gallinero, la chaya, entre otros. La idea es que a través de análisis bromatológicos se construya participativamente las principales recomendaciones de manejo y uso, con el fin que el conocimiento sea compartido con otras comunidades de la ecorregión del Chicamocha.

Finalmente, Juan Leonardo Cardona, investigador de Agrosavia y líder del proyecto, dice que el “proyecto comprende actividades para fortalecer los emprendimientos de las mujeres en cuanto a la elaboración de productos para el consumo humano, basados en especies locales, con el fin de fortalecer la economía de las familias y el territorio”.