Cuando una sim card es más peligrosa que una pistola

Los productores pecuarios del Meta dejaron de contestar llamadas de números desconocidos, para evitar ser víctimas de la extorsión. Cuotas entre $10 mil y $50 mil exigen los delincuentes por cabeza de ganado. Nadie del Gaula del Meta responde.

La extorsión está fuera de control en el departamento, especialmente en la región del Ariari. Los habitantes de Granada, Fuente de Oro, Mesetas y Vista Hermosa viven con el temor permanente de ser la siguiente víctima de las intimidaciones telefónicas. Los blancos predilectos de las organizaciones criminales y la guerrilla son los ganaderos, a quienes les exigen sumas entre los $10 mil y $50 mil por cada bovino que posean. (lea: Ganaderos de Yondó a merced de la delincuencia)

El miedo es tal que la gran mayoría ha optado por no contestar el celular cuando no reconocen el número del que están recibiendo la llamada, pues temen se trate de alguna organización al margen de la ley que los esté buscando para exigirles dinero.

Juan Manuel*, un empresario que ya ha sido víctima de las extorsiones, aseguró a este portal que actualmente una sim card es mucho más letal que un arma de fuego con salvo conducto, ya que ese pequeño chip les permite a los criminales realizar todas las llamadas que deseen, generar temor y luego deshacerse de ella; después compran otra y repiten su accionar criminal sin inconveniente alguno. (Lea: Hurto de ganado en el país aumenta cuando se acerca la Navidad)

“¿Qué tan difícil es comprar una sim card prepago y recargar minutos?, eso lo puede hacer cualquiera. Usted la compra, no tiene que presentar ni la cédula para hacerlo, porque el interés de las empresas de telefonía es tener más clientes, lo que no saben ellos es que así nos llaman, nos intimidan y exigen mucha plata”, añadió el empresario.

Un caso similar le ocurrió a Jairo**, un comerciante y propietario de una finca a quien la guerrilla le estaba exigiendo altas sumas de dinero a cambio de no atentar contra su familia. Inicialmente, la cuota era $10 mil por animal, pero la presión aumentó y los delincuentes empezaron a exigirle $50 mil por cabeza, por lo que prefirió vender todo e irse. (Lea: La seguridad empeora, según Encuesta de Opinión Ganadera)

Pero el más preocupante fue el caso de Martín***, un ganadero a quien por no pagar vacuna, los guerrilleros le invadieron su predio y se le llevaron 900 reses, por fortuna ante la rápida acción de las autoridades pudo recuperar 720.

“Primero ya no estamos tranquilos, segundo las autoridades poco o nada hacen. Muchas veces la gente pone la denuncia en el Gaula y allá les preguntan si la organización que está extorsionando es delincuencia común o guerrilla. Sí es con delincuentes dicen que sí nos ayudan, pero cuando son los otros señores, nos dicen que mejor negociemos”, argumentó la víctima. (Lea; Informe Especial: Panorama de la extorsión en Colombia)

CONtexto Ganadero llamó al Gaula del Meta para transmitirles lo denunciado por el productor, pero no atendieron los llamados que hizo este diario.

En días pasados, el general, Jorge Enrique Navarrete, comandante de la Séptima Brigada del Ejército en la región del Ariari, en entrevista en un diario regional calificó de zánganos a los guerrilleros que están extorsionando a los productores lácteos de la zona. “Mantienen como el sabañón carcomiendo de lo que produce la gente trabajadora”, agregó. (Lea: Ganaderos del Cesar le temen más al secuestro que a El Niño)

El uniformado pidió a las víctimas que denuncien los casos, ya que es una situación generalizada en área rural de Mesetas, San Juan de Arama, Vista Hermosa y Puerto Rico, en el sur del Meta. “Aunque no hay denuncias porque al campesino le da miedo; la ofensiva se mantiene en contra de los frentes 27, 40, 43, 53 y la columna ‘Manuela Beltrán’ del Bloque oriental de las Farc”, remató Navarrete.

*;**;***; nombres modificados a petición de las fuentes.