Comienza a morir ganado en el Caribe por el verano

Trashumancia, desnutrición, caída en producción láctea, padecimiento de enfermedades y muerte son las palabras que por estos días pronuncian ganaderos de la región Caribe de Colombia donde no ha caído suficiente lluvia para el sostenimiento de la actividad pecuaria.   De acuerdo con varios productores pecuarios, se comenzaron a presentar casos de reses muertas producto de la debilidad y padecimiento de enfermedades clostridiales, típicas en época de verano. Las lluvias prolongadas no se han hecho presentes en la región desde diciembre del año anterior. (Lea: Ganado de Sucre en riesgo de muerte, desde 2014 no llueve)   Atlántico es uno de los departamentos más afectados por la presencia de enfermedades de carbón o clostridiales que matan al ganado. Según Carlos Arturo Zambrano, médico veterinario y profesional en Fundación en Gestión Productiva y Salud Animal del Fondo Nacional del Ganado, FNG, la movilización de animales a zonas en las que haya pasturas los debilita y propicia la posibilidad de que adquieran los carbonos y puedan morir al poco tiempo.   “La falta de alimento, la movilización y las enfermedades han matado ya animales en el corregimiento de Monte Rubio”, detalló el profesional del FNG.   Alirio Otero, ganadero en Fundación, ha visto morir sus reses atolladas en represas de agua y a hembras después de parir débiles. “Desde el 9 de diciembre no llueve. Han caído unos chaparrones aislados y cuando el ganado entra a los reservorios, que están casi secos, no son capaces de salir por lo débiles que están y mueren atrapados. Ya en mi finca han muerto varias reses así”, señaló.   Otero contó que la producción láctea se redujo al 30 % y se ha retrasado el proceso de ceba de los animales que van a sacrificio para el consumo humano.   De igual manera, manifestó Zambrano, el ciclo de vacunación no se ha desarrollado en el tiempo requerido porque algunas fincas tienen reses que no están en la capacidad física de recibir el inmunológico.   Leonardo De Las Salas, coordinador en Córdoba de la Unidad Regional de Desarrollo de Ganado, URDG, del FNG administrado por Fedegán, aseguró que las lluvias que se registran “no son suficientes” para el resurgir de las pasturas y eso ha provocado “retrasos en la vacunación contra la aftosa. (Lea: La costa caribe muere de sed y el Gobierno no da soluciones)   Fídiar José Hernández, profesional en Sincé de Gestión Productiva y Salud Animal del FNG, anotó que podría asegurar que Sucre es una de las regiones más secas del país en la actualidad y muestra de ello es la trashumancia que mantiene a los ganaderos exponiendo la vida de sus ejemplares.   “Acá no han caído sino 2 aguaceros y han muerto animales porque no hay pastos ni agua. El 60 % de los animales fueron llevados a La Mojana. Los ganaderos han tenido que trasladar ganado de noche porque de día por el sol se arriesgan a que mueran más”, describió el médico veterinario de Sincé.   Jaime García Monte, ganadero en Sucre, ratificó que “la situación está grave” y si el panorama no cambia, con la llegada de lluvias fuertes o alimento proporcionado por el Gobierno, los hatos disminuirán hasta dejar a los pequeños, medianos y grandes productores pecuarios sin una base económica para subsistir.   Otero dijo: “recibimos un silo para darle al ganado del Ministerio por intermedio de Fedegán. Lo compramos a buen precio pero no alcanzó y ahora solo se consigue en Córdoba y el pago del flete cuesta mucho. Necesitamos más ayuda”.   Aún no se tiene un reporte oficial del número de animales muertos.