Aprenda a tratar lesiones en músculos de patas traseras de sus vacas

En algunas ocasiones y luego de un parto complicado, las vacas pueden llegar a sufrir lesiones en los nervios de las patas traseras. Médicos veterinarios a menudo denominan a esta condición 'Parálisis del nervio obturador'.   El nervio obturador que es aquel que se localiza en la cavidad pélvica y controla los músculos del muslo. Resulta ser uno de los más afectados en el parto. Si este se lastima, la vaca no podrá mover las patas traseras y se le dificultará ponerse de pie.   De acuerdo con Andrés Sinisterra, médico veterinario-zootecnista y profesional en proyectos estratégicos del Fondo Nacional del Ganado, FNG, administrado por Fedegán, cuando el nervio obturador se lesiona se le debe aplicar un antiinflamatorio al animal para ayudarle a recuperar su movilidad.   “Es importante prevenir esta situación en el momento del parto. Se debe estar atento a detectar si este es distócico o no. En novillas se produce cuando el nacimiento tarda más de 2 horas y en vacas más de 5 o 6. Cuando esta situación ocurre es necesario intervenir lo antes posible y realizar una tracción manual”, explicó el médico veterinario.  (Lea: 7 estrategias para asistir el parto de una vaca)   Sinisterra también recomendó hidratar lo suficiente el animal para que no sufra durante el parto. En caso de que una vaca se deshidrate, se puede llegar a necesitar de 20 a 25 litros de suero para poder restablecer el equilibrio de líquidos del animal.      Por otro lado, es un mal síntoma cuando se observa que una vaca permanece echada por más de 24 horas. Se podría decir que el pronóstico del animal es reservado. Cuando esto ocurre se ayuda a la res a levantarse lo más pronto posible.   “El operario, mayordomo o encargado de la finca debe entrar a auxiliar el animal y hacer que este se pare lo más rápido que se pueda. Una de las opciones que se ve mucho en las lecherías especializadas, en las que se cuentan con vacas de gran tamaño, es colgarlas. Se utiliza un arnés, con unos costales y unas bandas de caucho para lograr que la res mantenga estiradas sus extremidades, y así evitar ulceras y otros daños”, indicó el experto.   César Gómez Velázquez, médico veterinario, especialista en gerencia de empresas agropecuarias, con maestría en ciencias veterinarias, aseguró que en un parto prolongado el ternero puede lesionar el nervio obturador. (Lea: No deje que su ganado ‘salga de la cancha’ productiva por lesiones)   “La presión que hace el recién nacido puede bloquear de cierta manera los nervios y esos músculos no se mueven, por lo cual después del parto el animal va a tener un problema similar al de la vaca caída, pero no por hipocalcemia, sino por un calambre muscular que puede ser pasajero o no”, manifestó el especialista.   Por lo general, en partos de crías de gran tamaño, es muy frecuente que estas lesiones ocurran. Velázquez propone tratar al animal con relajantes musculares o analgésicos y con complejo B. Además aseguró que no está de más aplicar 250 centímetros de calcio intravenoso para que el músculo se empiece a recuperar.   El profesional de salud animal del FNG coincidió con su colega en que se debe evitar que la vaca permanezca echada. Lograr mantenerla en pie es una buena opción para tratar lo que se conocer como una 'Parálisis del nervio obturador'.