Las vacas de la 'cosa nostra'

Hablar de Italia de inmediato nos hace pensar en pastas, quesos, el Circo Romano, la pasarela de Milán, entre otras cosas. Sin embargo, lo que muchos desconocen es que en los campos colombianos cada vez más ganaderos se dedican a la crianza de vacas italianas, unos animales con unos rendimientos que “mamma mia”.

El primer intento por traer estas vacas al país se dio por allá en 1978, lo hicieron unos ganaderos del Valle del Cauca. Importaron un toro de la raza chianina, sin embargo no fue fructífero y desistieron. (Galería de razas italianas)

Tuvieron que pasar más de 20 años para que otra familia se aventurara a probar con ejemplares traídos de Italia.

“Nosotros nos dedicábamos a la crianza de Brahman, teníamos incluso un toro muy importante de esta raza, pero habíamos visto ejemplares en Venezuela y sabíamos que su comportamiento en cruces era excelente, pero no habíamos tenido oportunidad de trabajarla. En una feria en 1999 hicimos el contacto y compramos 3 terneros que fueron de diferentes ganaderías de EE.UU.”, cuenta Eudoro Acebedo, el pionero del tema en nuestro país.

Luego de 2 años, Eudoro y su familia empezaron a ver los resultados de estos cruces, y resolvieron traer el país 20 novillas y 25 toros de la raza Romagnola, también desde Estados Unidos. (Lea: Conozca las 5 razas bovinas más representativas de Colombia)

En 2009 deciden viajar a Italia, acercarse más a las razas, conocer todas sus ventajas, analizar su comportamiento, ver sus ganancias de peso y descubren que todo ello se puede desarrollar de manera más que favorable en el país. Durante este recorrido conocen a Filippo Rapaioli, quien se encuentra vinculado en ese entonces con la Asociación de criadores de ganado italiano y quien se encarga de acompañarlos en esa gira técnica.

La Asociación ve que el interés de los colombianos por criar la raza es serio y Filippo, que ya había venido 2 veces por turismo y conocía el potencial ganadero del país, y apoyado por la Asociación Italiana, decide crear una filial en el país.

En ese momento comienza un trabajo arduo, pero del que están más que orgullosos ambos, tanto Filippo como Eudoro. A los 2 se les nota la emoción al hablar del tema, lo hacen no solo con propiedad sino con un cariño único por lo que hacen; ambos tienen la certeza de que gran parte de todo lo que se ha logrado en el país con estas razas se debe a su esfuerzo y dedicación.

“Yo llego a finales de 2008 y arranco con el tema de las razas italianas. Hoy en día los números siguen siendo pequeños, pero ya hay algo significativo“, comenta Rapaioli.

Sobre las razas italianas

Acebedo sostiene sin atisbo alguno de duda que con las 5 razas italianas existentes: chiianina, marchigiana, romagnola, piemontés y regina, que es la del queso parmesano, han llegado a tener pesos muy superiores a los del ganado Cebú; “esto sin contar con su gran resistencia a las plagas, garrapatas y moscas; además muchos animales son de piel negra y pelo blanco, una característica que los hace especialmente resistentes al calor”.

Rapaioli menciona con emoción evidente que los animales son únicos y habla de las ventajas de sus cascos negros y fuertes, de lo bien conformados que están los distintos ejemplares, su excelente peso y lo aplomados que son. (Lea: Presentan nuevo listado con la distribución del inventario ganadero en el país)

“Estos animales tienen un gran rendimiento en canal, sobrepasan incluso el 60% y son muy eficientes en las coberturas alimenticias. Usted puede llevar 3 animales romagnola y solo llevaría 2 de otros Taurus”

Según los expertos, entre las ventajas más destacables de las razas están en que al ser Taurus, europeas tienen un alto nivel de crecimiento, una gran capacidad de convertir el alimento en carne y la más grande con respecto a otras taurinas, son el tener la piel totalmente negra, así como los pies, el prepucio, las mucosas, y eso es una muy buena adaptación para el trópico y pelo blanco fino. Es decir, las mismas características que normalmente tiene la raza cebú, pero con una mejor y mayor capacidad de adaptación a tierras tropicales.

“Si hablamos de canal en una raza como la marchigiana podemos estar cerca de un 67% de rendimiento en canal fría  y lo que es piamontés llegamos al 72%, que es un porcentaje que supera de lejos a las razas cebú que están alrededor del 50-52%”, explica el italiano.

Índices reproductivos de las razas italianas

En materia de fertilidad, las hembras las podemos empezar a preñar a los 16 17 meses y tener la cría a los 24 25 meses, edad en la cual se empieza a trabajar la raza cebú.

Los toros también son muy precoces y se pueden empezar a trabajar desde esos 16 o 17 meses y eso ayuda a disminuir los tiempos.

Datos finales

La Asociación ya tiene 15 miembros y según Eudoro Acebedo, su creación “le da a uno respaldo y ofrece más fuerza a las razas”.

Los libros están abiertos para permitir que cualquier ganadero vea, entienda y pueda trabajar en la obtención de hatos puros. (Lea: La raza gyr aumenta su demanda en Sucre)

Si usted está interesado puede ponerse con en contacto con la Asociación, en ella consideran que entre más criadores estén en el mercado se verán todos favorecidos, se podrán tener más y mejores datos que redundarán en una raza que hoy en día ya tiene cerca 1.200 animales puros y alrededor de 9.000 ejemplares en Colombia.