MinAgricultura también les incumple a maiceros de Tolima

Según las cifras de Fenalce, como consecuencia del verano solo se obtuvieron 30 mil toneladas de las 100 mil que se acostumbran. Productores de la región aseguran que uno de los temas que más los afecta es el costo de los insumos.   “Independientemente de la semilla que se utilice, si no tienen las condiciones adecuadas, pues no va a servir. En las últimas 4 cosechas se presentó el fenómeno de El Niño y es la razón principal por la que las provisiones disminuyeron y mucha gente perdió plata”, afirmó Jhon Peña, coordinador técnico de la Federación Nacional de Cultivadores de Cereales y Leguminosas, Fenalce, en Tolima.   En la actualidad se registran lluvias en esta región del país, lo cual ha generado que los productores no hagan uso del agua que suministra el Distrito de Riego de Usocoello. Sin embargo, una de las preocupaciones de los productores radica en el alto precio de la semilla. (Lea: ¿Logrará el maíz ser el eje central del campo en 2016?)   “Estamos hablando de precios que oscilan entre los $700 mil y $800 mil por la bolsa de semilla y a eso se suma que cada semestre le suben el precio. No existe un control de parte de alguna entidad y las multinacionales siguen haciendo su agosto, cobrando a su gusto, mientras que las necesidades de la gente hacen que se sigan comprando esos materiales. ¿Dónde está lo que prometió el Ministerio de Agricultura? Aquí lo que hace falta es una intervención por parte del Estado”, afirmó en diálogo con CONtexto ganadero, José Suárez, productor de maíz en Tolima.   Según el productor, para que el sector salga adelante, se requiere de una política que “ponga en cintura” a las empresas que comercializan las semillas y fertilizantes.   “Las ayudas que se están dando para el sector no se han podido ejecutar, porque entre los principales requisitos está el aseguramiento de los lotes y como muchos sufrieron por la sequía, entonces las aseguradoras no están ofreciendo este servicio, solo acceden quienes tienen riego”.   A su vez, el vocero del gremio recordó que hace 3 años se hizo el lanzamiento del programa País Maíz, el cual consistía en incrementar los niveles de seguridad alimentaria en Colombia, aumentar la oferta del grano amarillo tecnificado, disminuir las necesidades de importación de la industria avícola, porcícola y alimentos balanceados y fortalecer al sector, sin que hasta el momento nada pase. (Conozca el plan aquí)   “Cada vez que el Ministerio de Agricultura pone en conocimiento un proyecto de estos, que viene bien estructurado y se ofrece asistencia técnica, cobertura de precios, disminución en precios de fertilizantes y semillas, créditos, entre otros, nunca se cumple con eso; lo mismo va a pasar con Colombia Siembra”, comentó el representante de la Federación.   Por último, Mauricio Enrique Gómez, uno de los miembros del Comité Regional del Tolima de Fenalce, manifestó que entre los incumplimientos está el establecimiento de sistemas que les permitan a los productores acceder al riego, así como estrategias que les permitan a los agricultores superar dificultades como el cambio climático. (Lea: Déficit de agua se convierte en amenaza para maiceros tolimenses)   “Lo que necesitamos es que el Gobierno Nacional se siente con nosotros en las mesas de diálogo para que nos digan qué es lo que está pasando con los costos de producción y que también se tengan más en cuenta a los productores que poseen solo media hectárea, porque son los que tienen mayores dificultades”, informó Gómez.   De acuerdo con Peña, los municipios más golpeados por el verano fueron San Luis, Valle de San Juan y Armero Guayabal, en donde el sector maicero tuvo pérdidas superiores al 70 %, que equivalen a cerca de 70 mil toneladas de maíz entre septiembre de 2015 y febrero de 2016.   “Desafortunadamente esos agricultores no estaban asegurados, entonces esa plata se perdió, muy pocos han podido sobreponerse para volver a sembrar. Según el plan Colombia Siembra, la idea es aumentar el área en un millón de hectáreas en todo el país y aunque las políticas son buenas en el papel, llevarlas a la práctica es difícil. Ahora, hay que decir que estamos en un semestre algodonero, por lo que solo se sembraron 12 mil hectáreas”, preció el coordinador técnico de Fenalce en Tolima. (Lea: El reto cerealero: sustituir importaciones por producción nacional)